consejos de belleza | Cuidado de la piel
Hoy en día la ciencia avanza a pasos agigantados y la educación para la prevención del melanoma…
Sin embargo, aún quedan cosas por aprender. Hoy te contamos uno de los datos más interesantes sobre la protección solar: las diferencias entre los filtros solares minerales y los químicos.
Estos filtros actúan como una pantalla que refleja la luz fuera de nuestro cuerpo. Hace que los rayos nocivos reboten sobre la piel inmediatamente después de aplicarnos el producto.
Su mayor ventaja es que este tipo de filtro solar no lo absorbe la piel, por lo que sus funciones protectoras no dejan de ser efectivas salvo al contacto con el agua. Sin embargo, habitualmente dejan un aspecto blanquecino sobre la piel por el espesor del producto.
Este tipo de filtro solar son ideales para las personas con pieles sensibles o tendencia a la dermatitis.
Estos filtros solares no tienen una acción inmediata como los minerales. Sin embargo, su efectividad no se degrada al contacto con el agua o el sudor. Además, captan la energía solar y la trasforman, haciéndola inofensiva para la piel.
Desde el punto de vista cosmético, los productos con filtros solares químicos, son muy agradables para la piel. Pero, en ocasiones, y como la piel los absorbe, pueden producir ciertas alergias leves.
Lo ideal para obtener una protección solar óptima es utilizar productos que combinen ambos tipos de filtros solares. De esta forma tendremos nuestra piel protegida desde todos los frentes.
Y recuerda, es fundamental aplicarse el protector 30 minutos antes de la exposición para que sea completamente efectivo.