Tecnología al servicio de la belleza
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guapa

Bienestar | Lifestyle

Sentirse guapa es cuestión de actitud y autoconfianza

¿No te ves guapa? Puede que lo que necesites no sea otra crema cara u otro tratamiento…

¿No te ves guapa? Puede que lo que necesites no sea otra crema cara u otro tratamiento de belleza sino más confianza en ti misma.

Más allá de la belleza física, gran parte del atractivo procede del interior y depende de factores subjetivos, emocionales o anímicos. Por eso queremos ayudarte a sentir ese famoso ‘me siento guapa’, consecuencia directa de un estado de bienestar mental.

Para sentirse guapa lo primero es la actitud, ya que nos hace variar totalmente no sólo nuestra autopercepción ante la propia belleza sino, incluso, cómo de atractivos nos perciben los demás.

Sin embargo, por desgracia, el exceso de presión social, laboral, estrés, etc. Hace que a veces nos cueste vernos y sentirnos bien con nuestro aspecto físico. Por tanto, por muchos tratamientos estéticos que hagamos… si no te pones las gafas de la actitud no darán resultado.

Por eso, más allá de los entrenamientos para ser una chica fitness de moda, lo más importante es hacer entrenamiento emocional para poner en forma la seguridad en una misma y la actitud de nuestro atractivo. En definitiva, tenemos que poner a punto el músculo de la confianza y prolongar esa sensación de bienestar general que aporta el sentirse con el «guapo subido».

Y es que el atractivo personal es mucho más que unos rasgos bonitos. Es un conjunto de características que engloban desde una buena actitud al optimismo, confianza, simpatía, dulzura, vitalismo o sex-appeal. Que son las que hacen que una persona no necesariamente agraciada, pueda resultar extremadamente atrayente. De hecho, cuando el atractivo interior sale a la superficie, una nariz prominente, unos ojos saltones o una barbilla puntiaguda pasan a un segundo plano: la actitud del atractivo se impone. Vemos guapa a esa persona, aunque objetivamente no lo sea.

Sentirse más atractiva y poder proyectar ese sentimiento de tal forma que los demás también lo puedan percibir, es un básico para aumentar tu seguridad. Además, cuando nos sentimos mejor también la calidad de nuestra piel mejora por la liberación de ciertas hormonas, así que no solo nos sentimos más guapos, ¡es que lo estamos!

 

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