Durante años, el shiatsu (técnica tradicional japonesa que consiste en la presión localizada mediante la acción de los dedos y las palmas de las manos del terapeuta sobre el paciente) ha sido uno de los métodos más interesantes para tratar dolencias de diferentes orígenes. Sin embargo, en los últimos tiempos, se ha dejado atrás la camilla y se ha sustituido por el agua y el cuerpo del terapeuta como único soporte. ¿Cómo se llama esta nueva técnica? Watsu. Y hoy te explicamos en qué consiste.
La Asociación Española de Watsu y Trabajo Corporal Acuático sostiene que esta técnica aprovecha los patrones sanadores y de sustentación del agua a una temperatura (similar a la del cuerpo humano) de entre 34 y 37 grados.
Y es que el Watsu aprovecha una de las propiedades del cuerpo humano: su flotabilidad. Así, sin un punto de apoyo como sería la camilla en el masaje en seco, se pueden realizar movimientos disociados en todos los segmentos del cuerpo.
El Watsu permite además alcanzar grandes niveles de relajación, descomprimir las vértebras o movilizar las articulaciones y es perfecto para combinarlo con las demás técnicas en seco.
Beneficios del Watsu
Aunque es una técnica que desciende del milenario shiatsu, el Watsu apenas tiene unos treinta años de historia. Sin embargo, sus beneficios no podrían ser mejores:
- Mejora le sistema linfático y estimula el sistema inmune.
- Mejora la musculatura (los dolores musculares se reducen entre un 40% y un 60%).
- A largo plazo, combate problemas como el estrés, la ansiedad, la falta de sueño o la artritis.
- Aplicado en mujeres embarazadas, refuerza el vínculo entre la madre y el bebé.
¿Cómo son las sesiones?
La sesión de Watsu suele durar una hora. Es un proceso sumamente relajante porque el agua aliviana el peso de las vértebras y permite que la columna se mueva libremente, sin las restricciones que, en seco, provoca la gravedad.
La sesión son una serie de torsiones e inclinaciones que ayudan a aliviar la presión que una columna vertebral rígida ejerce sobre músculos y nervios. Además, los músculos se estiran de forma suave y gradual. Todo esto, hace que se eliminen metabolitos dañinos.
El estiramiento extensivo y los lentos movimientos del Watsu provocan una sensación de felicidad y relajación, al inhibirse las tensiones físicas.
¿Para quién es recomendable?
El watsu promueve el bienestar general, y es muy efectivo para prevenir enfermedades causadas por el estrés. Además, no es necesario saber nadar y se puede aplicar a todo tipo de personas, independientemente de su edad o complexión.
Los expertos aseguran que el watsu se graba en la memoria celular del cuerpo y sus resultados permanecen en la persona que las recibe. Desde el primer tratamiento, se puede aliviar el dolor, la rigidez y la tensión, y sus efectos pueden hacerse evidentes incluso en pacientes que sufran migrañas.
