Tecnología al servicio de la belleza
·
Tecnología al servicio de la belleza
·
Tecnología al servicio de la belleza
·
Tecnología al servicio de la belleza
·
Tecnología al servicio de la belleza
·
Tecnología al servicio de la belleza
·
Tecnología al servicio de la belleza
·
Tecnología al servicio de la belleza
·
Tecnología al servicio de la belleza
·
Tecnología al servicio de la belleza
·
Tecnología al servicio de la belleza
·
Tecnología al servicio de la belleza
·

Fitness

Mindfulness, algo más que una moda

El mindfulness es la palabra de moda, ¡está en todas partes! Lo vemos aplicado al deporte, a…

El mindfulness es la palabra de moda, ¡está en todas partes! Lo vemos aplicado al deporte, a la dieta, a la gestión de nuestros problemas diarios, a la educación de los más peques… Pero, ¿es tan bueno como cuentan?, ¿en qué consiste exactamente?

Este concepto puede traducirse como un estado de “conciencia plena” y no es una técnica nueva, ni muchísimo menos. En realidad, su origen se remonta hasta el siglo VI a.C en el seno de la cultura budista, aunque más tarde sería rescatado por la psicología moderna como un método terapéutico.

Podemos interpretarlo como una filosofía o técnica que aboga por disfrutar exclusivamente del aquí y ahora. ¿Cuántas veces no hemos simulado prestar atención en una reunión de trabajo mientras mentalmente recreábamos los planes de la tarde? ¿Acaso no hemos repasado nuestras tareas semanales mientras una amiga nos contaba la pelea con su chico?

Nuestras sociedades exigen un ritmo cada vez más acelerado y nosotros nos dejamos arrastrar por él, olvidándonos de lo realmente importante: el momento presente. Precisamente, el mindfulness lucha contra esta vorágine que nos obliga a poner el piloto automático para concentrarnos en el ahora, disfrutándolo como si fuera la experiencia más importante de nuestras vidas.

¿Cómo se consigue?

Se trata de un camino largo en el que es importante tener paciencia y, sobre todo, olvidarnos de la meta para disfrutar de cada paso.

El estado de “conciencia plena” se alcanza a través de la meditación, el control de la respiración y distintas posturas. A partir de entonces no es necesario ningún lugar específico para practicarlo, de hecho, puedes llegar a implementarlo en tu vida durante las 24 horas.

En todo caso, es un método bastante complejo, de modo que al inicio conviene contactar con un profesional que nos enseñe las pautas necesarias para ponerlo en práctica.

 ¿Cuáles son sus beneficios?

Los beneficios del mindfulness son innumerables y lo son para todo el mundo (no es necesario tener problemas psicológicos para embarcarse en este viaje).

La conciencia plena del ahora aporta serenidad, paz y mayor conocimiento de uno mismo. Mejora la concentración y, con ella, nuestras capacidades para afrontar las distintas encrucijadas de la vida. Además, nos ayuda a dejar a un lado la negatividad, a sentir mayor empatía por los demás y a aumentar nuestras aptitudes creativas.

¿Dónde puede aplicarse?

En realidad es posible aplicarlo a cualquier ámbito de la vida, ya que el mindfulness nos ayuda a acabar con el ruido mental que entorpece la mayoría de nuestras actividades. En cualquier caso, estos son algunos de los ámbitos donde su uso se ha hecho más popular:

  • Ámbito profesional: donde a menudo nos cargamos con tantas tareas que resulta imposible prestarles una atención de calidad. Al final nos sentimos cansados, víctimas del estrés, torpes o poco eficaces. Gracias al mindfulness es posible gestionar con éxito estas pequeñas crisis, aprendiendo a sobrellevar los cambios y la toma de decisiones, mejorando nuestra comunicación con los demás y nuestros aportes creativos.
  • Ámbito nutricional: muchas veces comemos de forma impulsiva, porque estamos nerviosos, cansados o no sabemos qué hacer. El mindfulness aplicado a la dieta consiste en comer de forma plena, saboreando cada bocado en el tiempo necesario, sin prisas, de la forma más saludable. Un sistema cada vez más empleado en los métodos de adelgazamiento, ya que más importante que el qué comemos es el cómo lo hacemos.
  • Ámbito deportivo: la concentración en el presente aumenta al mismo tiempo el bienestar producido por el ejercicio en sí como el rendimiento físico. Se intensifican las sensaciones corporales, la conciencia del esfuerzo y la mejora, de ahí que muchos deportistas profesionales hayan decidido sumarlo a sus rutinas.
  • Ámbito pedagógico: ideal para mejorar la atención de niños con TDAH. Pero no solo eso. También les ayuda a desarrollar la memoria, a combatir situaciones de ansiedad y a poner en marcha los mecanismos del bienestar, creciendo plenamente felices.
  • Ámbito sexual: ya que alcanzar la relajación y conciencia del ahora es esencial para tener unas relaciones sexuales plenas. El estrés es el principal enemigo de la libido y gracias al mindfulness es posible desterrarlo para concentrarnos exclusivamente en lo que está ocurriendo. El resultado es un mayor deseo sexual y satisfacción.