consejos de belleza | Cuidado de la piel
Aunque ya somos conscientes de la importancia de la protección solar, muchas veces nos olvidamos de ciertas…
Aunque ya somos conscientes de la importancia de la protección solar, muchas veces nos olvidamos de ciertas zonas que necesitan su cuidado, como el resto del cuerpo.
Tenemos que tener una cosa clara: la piel de los labios es diferente a la del resto del cuerpo. Es mucho más fina y delicada, por lo tanto, resulta una zona extremadamente sensible, lo que la hace más susceptible a los rayos del sol, y a cualquier agresión externa. Por esto es fundamental utilizar bálsamos con FPS alto, y no sólo en verano, sino durante todo el año. Además, no contiene melanocitos, y no se broncea, por lo que está menos protegida de forma natural. Este verano, no olvides tus labios.
Seguramente no conozcas a nadie que tenga la costumbre de aplicarse protección solar en las orejas. Sin embargo, a os pocos días de llegar a la playa, se nos ponen rojas y nos escuecen por el efecto del sol. A veces incluso se nos queda la marca de los pendientes. Así que toma nota y acuérdate de ponerte protección en las orejas.
Quizá quemarse los empeines de los pies es más habitual, pero, a pesar de que ya nos sabemos la historia, todos los años nos los volvemos a quemar. Si bien es cierto que es una zona en la que es muy incómoda tener la crema puesta, también es una parte de nuestro cuerpo que está muy expuesta por su posición con respecto al sol, que puede incidir plenamente de forma vertical. Por esto es fundamental aplicar cremas con FPS alto.
Aplicarnos crema de manos quizá forma parte de nuestra rutina, pero no es muy habitual que estas cremas tengan factor de protección solar. Sin embargo, todos sabemos cómo las manos revelan el paso de los años y que son más propensas a arrugas y manchas que cualquier otra parte del cuerpo. Esto, sumado al poder que tiene el sol para envejecer nuestra piel, supone otra razón más para tener en cuenta la protección de nuestras manos contra las radiaciones solares.