La llegada del invierno y el frío no es sólo sinónimo de abrigos, viento y bajas temperaturas . También es una ocasión importante para empezar a cuidar nuestras manos y su piel de una manera especial.
Nuestras manos son nuestra tarjeta de presentación. Unas manos hidratadas y bien cuidadas, dice mucho de nosotros, pero el aire frío reseca nuestra piel y las corrientes de aire artificiales, como la calefacción o los termostatos, no ayudan a su hidratación.
Te contamos, a continuación, algunos trucos y consejos para lucir las manos perfectas.
1# Excesiva hidratación
La capa más externa de nuestra piel está formada por una selección de compuestos que aportan la cantidad necesaria de nutrientes a nuestra piel. De alguna forma, esta capa lo que hace es absorber la humedad del ambiente y dotar a nuestra piel de la hidratación que requiere.
Sin embargo, esta capa puede resecarse con el ambiente más frío. Por ello, hidratar nuestras manos constantemente es imprescindible para tener unas manos bien cuidadas.
Un truco es disponer de crema de manos allí donde te encuentres, en el bolso, en la mesita de noche o en la oficina. Ten a mano siempre una crema nutritiva que te aporte la suavidad e hidratación que necesitas.
2# Cuidado de las uñas
No necesariamente unas uñas largas son una bonita carta de presentación. El cuidado de tus uñas debe empezar por no morderlas o quitar las pieles que se forman a su alrededor. Siempre es preferible que limes tus uñas antes que cortarlas y procura no retirar en exceso la cutícula, ya que este tejido se encarga de proteger el crecimiento de tus uñas.
Para evitar unas uñas amarillentas, aplica una base transparente previa al esmalte o laca de uñas. Y para alargar su duración, aplica la misma base transparente al finalizar de pintarlas. Esto hará que se vean tus uñas con brillo y que duren bastante más.
3# Exfolia tus manos
No solo la piel de tu rostro o tu cuerpo necesita de una correcta exfoliación. Con nuestras manos, estamos en contacto con cantidad de suciedad, gérmenes y bacterias dispersos en el ambiente. Es necesario que hagas una exfoliación semanal de tus manos. Puedes aplicar los mismos productos que utilizas en tu rutina facial de exfoliación. Verás que, al cabo de unas semanas, tus manos lucen mucho más suaves y sanas.
4# Cuidado con los productos químicos agresivos y el agua caliente
Por un lado, los productos de limpieza a menudo contienen compuestos abrasivos o dañinos para la piel. Un uso continuado de ellos, sin proteger nuestras manos, puede ser el causante de daños irreparables.
Por ello, utiliza siempre guantes de latex o nitrilo. Te protegerán de sufrir quemaduras o daños en las manos y evitarás que se vuelva más seca la piel de esta zona.
Algunos jabones, sobre todo aquellos con desodorantes o fragancias incorporadas, pese a lo que pueda parecer, pueden dañar la capa más externa de nuestra piel. Por ello, es mejor evitarlos y utilizar jabones naturales o con compuestos que favorezcan el cuidado de nuestras manos.
Por otro lado, el agua demasiado caliente daña nuestra epidermis. Es aconsejable lavarse las manos con agua templada y finalizar con un chorro de agua fría para reanimar la circulación en esta zona. Los vasos y arterias de las manos, son los encargados de transportar todos los nutrientes a las células de las uñas y favorecer así, su crecimiento. Por ello, un chorro de agua fría que reactive la circulación de esta zona es un extra que no debe faltar en tu cuidado de manos y uñas.
5# Manos ásperas o secas
Algunas pieles necesitan un aporte extra de hidratación para lucir sanas y cuidadas. Por ello, para este tipo de pieles, toda hidratación es poca. Uno de los trucos más efectivos y conocidos es aplicar vaselina o crema hidratante antes de dormir en las manos, colocar unos guantes y dormir con ellos toda la noche. A la mañana siguiente notarás como la piel de tus manos está mucho más hidratada y nutrida.
6# Cuidar la alimentación
Suena ya a tópico, pero una correcta alimentación es la base para lucir una piel radiante ya sea en el rostro, en el cuerpo o en las manos. Una dieta equilibrada dota al organismo de los nutrientes que necesita para que nuestras células crezcan de forma sana. Todo lo bueno que ocurran en nuestro interior, se verá reflejado en nuestra piel.
Comer frutas y verduras en abundancia aporta a nuestro cuerpo grandes beneficios. Come de tres a cinco piezas diarias de fruta y/o verdura, ya sea en zumos, ensaladas o purés. Algunas frutas como el aguacate tienen ácidos grasos esenciales beneficiosos para el cuidado de tus manos.
Por último, beber dos o tres litros de agua diaria aportará a tus células la hidratación necesaria para su correcto funcionamiento. Además de que mejorará otros aspectos, es fundamental para el cuidado de la piel y en especial, de las manos.
7# Usa guantes para el frio
El uso de guantes o manoplas protege nuestras manos del frío en la calle y es fundamental para el cuidado de la piel de nuestras manos. Utiliza guantes que no aprieten en exceso y corten la circulación de las manos y con materiales que dejen transpirar a la piel.
