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Seguro que más de una vez te has preguntado por qué te despiertas tan cansada. ¿Existe algún…
Seguro que más de una vez te has preguntado por qué te despiertas tan cansada. ¿Existe algún remedio para recuperar la energía?
Normalmente recurrimos al café como ese gran aliado para ponernos las pilas. Sin embargo, existen infinitas cosas que puedes hacer y que te van a aportar la misma energía, o más, de forma que podrás combatir ese agotamiento crónico cuyos efectos sufrimos cada y mañana, incluso a lo largo de todo el día.
Lo primero que recomiendan los expertos es tomarse un momento, sentarse en el borde de la cama y realizar tres respiraciones profundas por la nariz, de esta forma enviamos una importante cantidad de oxígeno a nuestro cerebro y así se va activando el cuerpo, además de que contribuye a que el sistema nervioso funcione mejor por la oxigenación que otorgamos a nuestras células. Activarás la energía para entrar en funcionamiento.
Retrasar la alarma del despertador afecta a tu estado de ánimo y te resta energía, ¿quién lo diría? Pero lo cierto es que ese gesto confunde a nuestro cerebro porque, al volvernos a dormir, se reinicia el ciclo del sueño, que vuelve a interrumpirse pasados 5 minutos. Esto hace que la sensación de cansancio sea mayor. ¡Evítalo y levántate al primer tono!
Los expertos han comprobado que la deshidratación dificulta la puesta en marcha de nuestro organismo. Después de toda la noche sin ingerir nada, es fundamental beber un vaso de agua nada más levantarnos ya que aporta energía a cada célula de nuestro cuerpo y lo rehidrata.
No hace falta que desayunemos nada más levantarnos, pero es una comida que no deberíamos saltarnos bajo ningún concepto. Es muy importante además tomar un desayuno energético que contenga un zumo compuesto de frutas y verduras ricas en fibra y antioxidantes, un hidrato de lenta liberación (como pan integral o bollería que no contenga azúcares refinado) y proteínas que te van dar energía (huevos, jamón york…). ¡Y a por el día!