Cuidado de la piel
Como sabéis, el cuidado facial es una rutina de belleza que debemos llevar a cabo a diario…
Como sabéis, el cuidado facial es una rutina de belleza que debemos llevar a cabo a diario si queremos que nuestro cutis luzca fresco, hidratado, firme, saludable y, sobre todo, joven. El tratamiento avanzado de la Capsula del tiempo acelera los efectos y mejora el aspecto de nuestra piel de un modo profesional. Pero es importante que sepamos las rutinas que no debemos olvidar para mantener un buen cutis.
Sin embargo, a menudo, ya sea por desconocimiento, por falsos mitos o creencias, por malos hábitos adquiridos o incluso por pereza (sí, esa gran enemiga), cometemos errores en nuestro cuidado facial que pueden resultar muy perjudiciales a medio y largo plazo, haciendo que nuestra piel no muestre su mejor aspecto.
A continuación, os lo contamos:
Es verdad que a veces nos puede la pereza y tenemos la tentación de irnos a dormir sin quitarnos el maquillaje ni limpiar el rostro de las impurezas acumuladas durante el día. ¡¡ERROR!! Según un estudio reciente, no limpiar el cutis de manera conveniente puede hacer que éste envejezca hasta 10 días. Así que ya lo sabes: no te olvides de hacer una buen la limpieza facial cada noche.
Para ello, te recomendamos utilizar una loción limpiadora, un desmaquillante de ojos suave y un tónico. Y si además, cada cierto tiempo puedes realizarte una limpieza facial en un centro de belleza, mejor que mejor.
Como sabéis, existen diferentes tipos de piel: seca, mixta y grasa. Lo primero es identificar a qué tipo pertenece nuestra piel y cuáles son sus necesidades, y, en función de esto, darle los cuidados que más le convienen.
Es un error muy habitual creer que una piel grasa o mixta no necesita hidratación, porque «ya la lleva de serie» y que un plus de hidratación no hará otra cosa que engrasarla todavía más. No confundamos hidratación (agua) con grasa.
Aunque tu piel tenga tendencia grasa, necesita que la hidrates cada día, especialmente en invierno. De esta manera lucirá tersa y prevendrás el envejecimiento prematuro.
Ya os lo hemos comentado con anterioridad. Proteger la piel de los rayos UV no es algo que deba hacerse sólo en verano y cuando vamos a la playa. Como sabéis, la destrucción de la capa de ozono nos expone cada vez más al sol y sus radiaciones. Éstas pueden ser muy perjudiciales para nuesta piel, provocando envejecimiento, manchas o incluso cáncer de piel.
Por tanto, es muy importante aplicar en el rostro una crema «pantalla total» (con SPF +50) siempre que vayamos a estar expuestos a la luz del sol. Es decir, siempre que salgamos de casa. Y no, no sólo en verano.
A menudo nos concentramos en cuidar sólo la piel del rostro y no pasamos de ahí. Casi todos conocemos la zona T (la que va de la frente hasta la barbilla, pasando por la nariz); en cambio, la zona Y (que comprende el área alrededor de la mandíbula y el cuello) es la gran desconocida.
Como sabéis, la piel del cuello tiene mucha tendencia a perder firmeza si no se le presta la suficiente atención. Además, las arrugas en la zona del cuello hacen parecer más mayor, por lo que hay que evitar a toda costa que aparezcan.
Por ello, es fundamental, a partir de cierta edad, aplicar la crema reafirmante y antiarrugas también en cuello, mandíbula y escote. Ya sabéis: no os olvidéis de la zona Y.
Sí, una vez más la pereza nos puede. Porque total, si ya me aplico una crema antiarrugas y una hidratante por todo el rostro y el cuello, ¿para qué aplicarme otro producto en la zona del contorno de ojos?
Pues por una sencilla razón:
No hay que olvidar tampoco que el área de los ojos no es sólo es la parte inferior de los mismos, donde se hacen más evidentes los signos de cansancio y las líneas de expresión. Los párpados también van perdiendo firmeza. Así pues, recordad: para evitar los primeros signos de la edad, así como las bolsas y ojeras, hay que aplicar diariamente un producto en la zona del contorno de ojos.
Y vosotras: ¿cuáles de estos 5 errores comunes cometéis? ¿Conocéis alguno más que queráis compartir?
Ya sabéis, en la lista de propósitos para el nuevo año, hay que añadir algunos más: corregir estos errores y adquirir buenos hábitos. Nuestra piel nos lo agradecerá.